El marcador final 32-14, fue paliado gracias a la gran línea ¾ de Alcalá con dos ensayos bien trabajados. Alcalá viajaba a Toledo con una idea clara: traer una victoria a domicilio tras la derrota agridulce ante Tasman.
Empezó el partido en Toledo con un juego desorganizado y sin base durante los primeros compases de juego, que Toledo aprovechó marcando el primer ensayo sin transformación (5-0). Pero esto no quedo así, y al ver que la delantera rojilla no entraba en el partido, los gordos de Toledo avanzaron metros en melé y touche arrastrando a Alcalá a un marcador de veinte abajo (20-0), el infierno toledano acechaba a Alcalá.
Después del descanso, los rojillos empezaron a mostrar otra cara: físico y juventud. Carra, que salió en la primera parte, anotó un gran ensayo desplegando velocidad y habilidad llegando a transformarlo Ureña (20-7).
Alcalá se empezó a encontrar mejor en ataque, aunque la delantera seguía como en la primera parte. Aun asi, Rodrigo explotó la banda y subió otro ensayo para Alcalá apretando el marcador con la transformación de Ureña (20-14).
Toledo veía como el físico mermaba y realizó cambios para poder empujar como en la primera parte. Los dos últimos ensayos subieron para Toledo con dos jugadas de continuación poniendo como resultado final 32-14.
Alcalá no estuvo acertada en este partido pero supo leer el juego en la segunda mitad, mientras Toledo se convirtió en un rodillo en delantera. Los manchegos se colocan primeros y candidatos al ascenso de categoría.