Se presentaba Iplacea ante su segundo rival, EDM Ademar, con muchas dudas debido al flojo debut de la jornada anterior.
La mayor envergadura en conjunto del equipo rival, la homogeneidad física de sus componentes y lo visto en su primer encuentro ante Anaitasuna, hacían prever un encuentro, cuanto menos, complicado.Tras iniciarse el encuentro se puede percibir un conjunto complutense completamente reformado, evocando los mejores momentos de la Fase Final madrileña, entonado defensivamente, que maniata al conjunto leones.
Veinticinco minutos de juego de intensa defensa que consigue abrir una importante brecha brecha en el marcador al poco de iniciarse la contienda, para desesperación del conjunto rival y alegría de los seguidores alcalaínos que jalean a sus muchachos desde la grada.
Al descanso una cómoda ventaja se refleja en el marcador. La segunda mitad presenta a un equipo alcalaíno diferente, controlando el juego, marcador y tiempo, reservando fuerzas para el envite final, que se dedica a mantener la cómoda renta y permite la entrada en el terreno de juego a toda la plantilla, cumpliendo con la misión de adquirir experiencia, desgastar al oponente y proteger sus baluartes.
Al final la alegría desborda al conjunto de Iplacea que consigue un exitoso 33-26, que hace justicia a lo visto en el parqué pamplonica.
Finaliza esta segunda jornada con Anaitasuna encabezando la clasificación con cuatro puntos, en segundo lugar CD Iplacea empatado a puntos pero por debajo en el golaveraje general. Todo por decidir en la última jornada en la nos enfrentaremos a los anfitriones. La plaza para la Fase Final Nacional a la espera de tener dueño. A Iplacea solamente le sirve la victoria.