El ‘Sanga’, diminutivo cariñoso con el que muchos se refieren al colegio San Gabriel, es toda una institución en Alcalá, a la que llegó en 1968 para quedarse y educar con su propuesta religiosa a generaciones enteras de alcalaínos, entre ellos al vigente alcalde complutense, el socialista Javier Rodríguez Palacios. Quien, por cierto, delegó en la concejala de Educación, Diana Díaz del Pozo, la representación municipal en la gran fiesta del centro durante las primeras jornadas y luego presidió la entrega de trofeos del cross.

El centro privado, adscrito a la congregación de los religiosos Pasionistas, una orden fundada por San Pablo de la Cruz; celebra durante todo el fin de semana una gran fiesta en recuerdo de su inspirador, San Gabriel de la Dolorosa, patrón de la juventud italiana y uno de los santos más jóvenes de la Iglesia católica al lograr la santidad con sólo 24 años.

En su memoria, el programa incluye su célebre cross, cada día con más participación y una preparación profesional que permite competir, en distintos formatos y recorridos, a pequeños y mayores: pádel, baloncesto, fútbol o natación para todas las edades, en unas instalaciones ciertamente de enorme calidad.

Ahí no ha acabado la cosa: competiciones deportivas para los más pequeños, un campeonato de ajedrez de lo más entretenido y una muestra de disfraces completan la propuesta de ese centro educativo privado abierto a todo el mundo que abarca desde la educación infantil hasta el bachillerato.

Y así, tras casi tres días intensos y de músculo físico y espiritual, el San Gabriel se ha conmemorado a sí mismo, demostrando que, aunque está situado e las afueras de la ciudad, en realidad se ubica en el centro de la vida social, educativa y religiosa de Alcalá.

Share This